GOBERNANTES BÁRBAROS

Creo categóricamente que los humanos descendemos de un “mamífero protohumano X”, conforme plantea el reconocido científico colombiano Mauro Torres (“Discurso sobre el nuevo humanismo y el moderno liderazgo”. Torres Mauro. Digiprint Editores E.U., Bogotá, Colombia, 2011). Su ADN contenía cambios potenciales relacionados con la marcha bípeda/erguida, capacidad para generar ideas novedosas/originales y herencia genética ascendente progresiva. Además, rebosaba de energía para separarse del mamífero-biológico y mutar en humano histórico-cultural, merced a su maravillosa víscera cerebral.

La secuencia evolutiva humana, prevalecientemente biológica/mamífera, permitió el continuum de los homínidos primatoides a homo habilis y, posteriormente, a los ergaster erectus, los cuales originaron una doble descendencia: pueblos Civilizados Sapiens –creadores/verbales/reflexivos/conscientes- y Neandertales –con escasa diversidad funcional motriz/mental-, quienes convivieron pacíficamente durante milenios, en el paleolítico superior, con los pueblos Auriñaciences -artistas creadores, con baja capacidad intelectual-. Neandertales y Auriñaciences se hibridaron, formando las comunidades Bárbaras. La diferencia sustancial entre los tres pueblos nombrados es el desarrollo del cerebro –órgano del comportamiento- y sus funciones mentales. En el primer momento de la evolución cortical dominaron las neuronas creadoras; y, en el segundo, aquellas que son basamento de las funciones racionales y verbales conscientes. Sostiene el Dr. Torres: “La creatividad fue anterior al verbo”. “La racionalidad verbal, es patrimonio exclusivo de los humanos”. “Modernizarse significó que el cerebro arcaico dominado por el hemisferio derecho con su función creadora…fue sustituido por el cerebro moderno con un hemisferio cerebral izquierdo dominante, ya no creador, sino racional, verbal, reflexivo, lógico, analítico, sintético, holista” (Ibídem).

Dos pueblos dotados con cerebros/funciones mentales opuestas colisionaron bruscamente: Sapiens –sedentarios con agricultura, ganadería, aldeas, caminos- Vs. Barbarus –nómadas, guerreros, “enemigos de la civilización”-, desencadenándose entre ellos la “Guerra Original”, ¡hecho desgraciado que perdura hasta ahora!, reflejado en las murallas defensivas de Jericó y Catal Huyuk (9.000 y 7.000 a.n.e.). En 3.000 a.n.e. los adversarios se “cruzaron” biológica/culturalmente, barbarizándose relativamente los civilizados y viceversa, originando una “mentalidad” y un “cuerpo étnico mestizo enfermo”, cuya fatal exteriorización es su incorregible belicismo. “De este enorme cuerpo mestizo de la humanidad, algo civilizado, muy bárbaro; algo pacífico, muy guerrero; algo constructivo, muy destructor; algo sano, muy corrupto compulsivo, parte la propuesta del Nuevo Humanismo” (Ibídem).

El comando del cerebro por el hemisferio izquierdo se produjo exclusivamente en los pueblos avanzados Magdalenienses Sapiens y su descendencia, NO en las comunidades evolutivamente atrasadas –Auriñaciences/Neandertales- que, al mestizarse, engendraron las poblaciones bárbaras, archienemigas de la Cultura/Civilización. Trabajar, seleccionar semillas, cultivar, domesticar animales, apacentar ganados, construir aldeas/caminos, educar, relacionarse socialmente, crear arte, pensar, hablar, etc., son ¡conductas propias de la humanidad civilizada! “La historia es el producto del trabajo de la humanidad, constituida por hombres y mujeres, suceso que debemos enfatizar…Se olvida que el cerebro de hombres y mujeres es el motor de la historia…El cerebro moderno es el cerebro histórico; el cerebro arcaico, con dominancia creadora, es el cerebro prehistórico –paleolítico” (Ibídem).

De lo antedicho se infiere nítidamente que ¡en las poblaciones civilizadas, existen individuos predominantemente bárbaros! Tales los casos de los actuales gobernantes Donald Trump (USA), Vladímir Putin (Rusia) y Benjamín Netanyahu (Israel), precedidos en diferentes épocas históricas por Gengis Khan –imperio mongol-; Atila –invasor del imperio romano-; Calígula/Nerón –emperadores romanos-; Adolfo Hitler –“holocausto judío”-; Francisco Franco –España-; Lyndon Johnson/Richard Nixon –Vietnam-; John Kennedy -Cuba-; Augusto Pinochet –Chile ; George Bush –Panamá/Irak/Afganistán-; Ronald Reagan –Grenada-; Álvaro Uribe –Colombia-, etc., todos, sin excepción, gobernantes brutales/inhumanos. Hoy estamos en la antesala de la invasión yanqui a Venezuela, con la falsa justificación de la lucha contra el narcotráfico. Realmente van tras la principal reserva petrolera del mundo. ¡Mañana será Colombia!

Para caracterizar al Atila moderno, destacamos algunos rasgos de la “personalidad” de Donald Trump: durante su primer mandato, integró una Corte Suprema prevaricadora para garantizar su permanencia en el poder. Es: i- Autoritario: impone sus ideas inflexiblemente –aranceles arbitrarios, genocidio en Gaza, muro fronterizo en México, asesinatos de venezolanos/colombianos en aguas internacionales-. ii- Prepotente: “los demás”, son inferiores. iii- Agresivo: “los otros”, son amenazas. Discurso político intimidante, ensamblado con su actitud violenta. iv- Narcisista: vanidoso, considera que “domina el mundo”. v- Manipulador: quiere sojuzgar a “los restantes”. vi- Mendaz: engañó a sus electores con falacias de seguridad/bienestar. vii- Racista: se identifica con los “ciudadanos estadounidenses, blancos, cristianos”. viii- Misógino: reiterados comentarios sexistas/machistas. Acusado de pertenecer al “grupo Epstein”. ix- Ambicioso: anhela intensamente conseguir poder/éxito/riqueza. Además, reclama “consideración”, posa frente a los mass-media, es antipático, prejuiciado, insolente, intolerante, discriminador, etcétera.

Pero los barbarus Trump/Putin/Netanyahu han sido afrontados valiente/dignamente por sus propios gobernados, pueblos sometidos y la comunidad internacional, haciéndolos retroceder en sus intenciones funestas. Sin que sea reconocido como “adalid mundial” -porque Colombia NO pesa en el concierto orbital-, Gustavo Petro ha censurado duramente las conductas imperialistas/belicistas de Washington, Moscú y Jerusalén, lo que le valió la “descertificación” y la “denegación de visa” norteamericana. Igualmente, ha reprochado a los países de la UE que no asumen posiciones condenatorias contra las hegemonías planetarias, el “cambio climático”, la “intervención militar” en otros países. Es praxis histórica que, cuando los imperios declinan, designan como gobernantes a personajes barbarus -irreflexivos, pendencieros, salvajes-, a fin de imponer por la fuerza lo que NO pudieron implantar con razones los intereses dominantes. Así ha vivido el mundo y, particularmente, Latinoamérica con sus capataces gringos. ¡Es hora de sacudirnos definitivamente de su yugo! LAS CONDICIONES HISTÓRICAS ESTÁN DADAS. Unidos orgánicamente todos los cerebros de hombres/mujeres de América Latina, ¡PODEMOS ENFRENTAR/VENCER A NUESTRO COMÚN OPRESOR!